Realizar una preselección de opciones te ayudará a saber qué peinado te favorece más. La elección de un tipo de peinado u otro dependerá, en gran medida, de la forma y las características de tu rostro:

• Rostro ovalado: si tienes este tipo de rostro, eres una gran afortunada, porque tendrás muchísimos peinados que te quedarán bien: con la raya en medio, hacia atrás, en recogidos o semirecogidos… La importancia de tu look residirá en mantener la cara completamente despejada.
• Rostro cuadrado: los peinados ideales en este caso serán los más románticos, como las ondulaciones y mechones sueltos.
• Rostro alargado: te verás genial con un recogido o algo más desenfadado, como un recogido con trenza bajo.
• Rostro redondo: los recogidos, sobre todo los altos, estilizarán por completo tu cara. Sobre todo, si se acompañan de flequillos de estilo desenfadado, rectos, pero abiertos o a un lado, por ejemplo, y cortados de forma ligeramente desigual.
• Rostro triangular: el flequillo te quedará genial. Y si lo combinas con moños altos, te favorecerá todavía más.
• Rostro romboide: una preciosa coleta en cualquiera de sus versiones será ideal.
• Rostro rectangular: los recogidos con gran volumen, altos o bajos, a un lado, y de carácter desenfadado, serán un gran acierto.

Y recuerda que, elijas el que elijas, tiene que estar en sintonía con el resto de tu look.